Por Luis Ríos
El Gerente Técnico del Instituto Nacional de Los Deportes (INDES), Lic. Rubén Quintanilla, me ha dejado bien clara la visión que tiene esa Institución, en cuanto a la problemática que se ha generado en torno al fútbol federado de nuestro país, donde el Gobierno de la República ya invirtió o gastó casi 15 millones de dólares desde el 2003, sin mayores beneficios para el desarrollo de la actividad deportiva más importante de El Salvador.
Aparte de la violación que se ha venido haciendo con la distribución del presupuesto que el Estado eroga al fútbol, en el entendido de que como deporte de las mayorías, símbolo de nuestra nacionalidad y patriotismo, merecía respaldo para mejorar su nivel competitivo, yo creo que también al INDES le preocupa que si a la Federación de Fútbol, se le hiciera un examen sobre una auditoría deportiva, lo aplazaría con muy malas notas, por cuanto no existe una planificación sistemática que indique que se haya iniciado el camino del desarrollo del fútbol en nuestro país.
El Lic. Quintanilla dice que “esperarían que la FESFUT presente una planificación técnica-administrativa a corto, mediano y largo plazo, que oriente los recursos financieros hacia un desarrollo del fútbol que llegue a todos los rincones del país, para que la masificación del fútbol sea la base donde inicie el tan ansiado desarrollo del balompié nacional”.
Obviamente que el Lic. Quintanilla, como técnico y planificador deportivo, espera que se hable del tema con una visión técnica y científica del problema del fútbol y en ese sentido, por ejemplo, la masificación deportiva, no se da porque este deporte se juegue por todos lados o que sea muy popular, sino de que, en dicha masificación, exista organización en sus estructuras, planificación que establezca metas y objetivos y que sea la base de toda una sistematización que nos lleve hacia el alto rendimiento.
También me quedó muy claro en esta plática con el Lic. Quintanilla, que el INDES no tiene porque hacer labores que competen a la FESFUT, como ordenar o suprimir a las Asociaciones Departamentales (ADFAS), asumir proyectos del fútbol federado o quitar personal que no tiene el perfil para los puestos en que fueron contratados, ya que esa es una responsabilidad propia de la misma Federación.
Sin embargo, yo pienso, que una verdadera planificación obligará a la FESFUT a realizar estos cambios, los cuales en algunos casos, como por ejemplo en el área técnica, significarán una profunda reestructuración, porque un nuevo Plan Nacional de Desarrollo del Fútbol, solo podrá realizarse con las personas que tengan el perfil idóneo y con el apoyo de las diferentes ciencias auxiliares del deporte, como por ejemplo entrenadores pedagogos del fútbol, planificadores, técnicos de informática, educadores y preparadores físicos, médicos, sicólogos y nutricionistas deportivos, etc. etc.
En todo caso, la labor de capacitación que se necesita será también inmensa, no solo para las nuevas personas que se contraten para fortalecer este Plan, sino para los que queden después de una exhaustiva evaluación, porque a mi entender, será más fácil adaptar a un ordenanza o una secretaria a labores específicas de desarrollo del fútbol, que a personas que se les nombró como técnicos o entrenadores solo para ayudarles con una plaza, que se conviertan en verdaderos entrenadores de fútbol o ejecutores del área técnica.
Según lo han denunciado también varios presidentes de estas ADFAS, es que dentro de la misma FESFUT o en las unidades técnicas de estas Asociaciones, hay entrenadores que recibieron alguna capacitación en la ejecución del Plan anterior que se inició en el 2003 y otros que solo tuvieron algunas inducciones sobre el mismo, que se han acomodado demasiado tiempo a “esa vida feliz sin hacer nada”, por lo que ya se olvidaron de lo que era ese Plan Nacional de Desarrollo del Fútbol y muy difícilmente encajarán en una nueva dinámica de trabajo.
Pero yo les digo a estos presidentes que eso tiene una solución muy fácil y lo que ellos están viviendo actualmente en estas ADFAS como producto del abandono de que fueron objeto desde el 2006, no debe ser motivo de atraso o decepción para que estos cambios se puedan dar, si es precisamente eso lo que los está provocando.
También creo que es el mejor momento, dentro de esta crisis, para tratar de revertir una grave situación que tiene postrada a una actividad tan importante para el desarrollo nacional.
La ventaja para los actuales protagonistas dentro del fútbol, tanto del INDES como de la FESFUT, es que ellos no tienen la culpa de que las cosas se hayan degenerado tanto y hayan llevado al fútbol federado (ligas profesionales), prácticamente a una “quiebra técnica”, lo cual es más producto del pobre nivel competitivo que tenemos, que de la misma crisis financiera nacional.
Pero si es responsabilidad de los actuales miembros de la FESFUT intentar valientemente revertir esta situación y en este sentido yo vuelvo a insistir en que dentro del Comité Ejecutivo de la FESFUT, hay personas muy valiosas y bien intencionadas que encabeza el Lic. Méndez Cabezas, que pueden dialogar con los demás sectores del fútbol, especialmente de las ADFAS, para que de manera conjunta, se busque una solución al problema del fútbol, aprovechando por supuesto esa buena disposición del INDES de colaborar, como también la tenemos todas las personas que de buena fe, vivimos a diario una actividad a través de la cual estamos formando y ayudando al desarrollo de cientos de niños y jóvenes de esta sufrida Nación.
Si ya tenemos ese diálogo franco, sincero y de amigos, entre personas amantes del deporte que pueden incidir en estos cambios como la FEFUT y el INDES. Si ya aceptamos los errores cometidos en el pasado. Si ya se demostró científicamente que sin planificación y capacitación no habrá jamás desarrollo. Si comprendimos que necesitamos la ayuda de Dios para entendernos, aunque a veces las posiciones sean tan encontradas o diferentes. Si nuestros necesidades o ambiciones personales no están por encima del bien común.
Entonces la mesa está servida para que el INDES y la FESFUT participen con agrado y departan por una solución y gracias a Dios, ahora si creo que le puedo decir a esta enorme afición, que estamos en los pasos correctos para recuperar la fe y la esperanza de que muy pronto el fútbol iniciará su camino hacia la recuperación.
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